¿Hielo picado o hielo gordo para preparar un gin tonic?

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¿Hielo picado o hielo gordo para preparar un gin tonic?

¿Hielo picado o hielo gordo para preparar un gin tonic?

Quien te diga que jamás se ha preguntado a sí mismo si el hielo picado o el hielo gordo son la opción correcta para preparar un gin tonic te está mintiendo. Pues como todo en esta vida, empezar en el mundo de la coctelería amateur o profesional es un ensayo y error. Al menos hasta que acumulas la experiencia que te permite afirmar que sabes preparar un gin tonic sin dudar de tus capacidades.

Desde Bruni Collin’s te traemos una explicación que resolverá esta importante duda de una vez por todas, para que así puedas preparar un gin tonic con nuestra excelente ginebra premium en la próxima oportunidad que tengas a tu alcance.

¿Por qué es una mala idea utilizar hielo picado al preparar un gin tonic?

Sin darle muchas vueltas, podemos afirmar que tu mejor alternativa para preparar un gin tonic siempre será utilizar hielos gordos. Es decir, aquellos que salen completos de la heladera, bien congelados. Realmente no es muy relevante si son redondos, ovalados o cuadrados.

La razón que convierte al hielo picado en una terrible opción para la preparación de un gin tonic es el tema de la solubilidad. Pues un hielo picado tiende a derretirse con mayor rapidez que no se llega a desarrollar en un trozo de hielo que está íntegro, sin fracturas.

Además, también está el hecho de que el agua que empieza a liberarse mientras el hielo picado se derrite contrarresta la existencia del carbónico en la soda o en el tónico que estás usando para tu bebida, de modo que toda la copa pierde su esencia con una fracción del tiempo que se daría si optas por un hielo gordo, justo como te recomendaría cualquier experto en coctelería.

Errores que no debes cometer al preparar un gin tonic

Por otra parte, está el factor de que garantizar que el hielo llegue intacto hasta después de terminar tu gin tonic no depende exclusivamente de la elección del tipo de hielo, así como tampoco es lo único que limita la posibilidad de que esta misma bebida mantenga su consistencia burbujeante, mientras la consumes a lo largo de tu conversación o baile.

Los siguientes errores también debes evitarlos a toda costa cuando te propongas preparar un gin tonic, especialmente si eliges la ginebra que te ofrecemos, que se destaca entre otras alternativas del mercado por más de 80 años de tradición.

1. Elegir mal el vaso

Los vasos angostos y alargados definitivamente no son apropiados al preparar un gin tonic, y por ello tu mejor opción siempre serán las copas grandes.

Para ser más específicos, te aconsejamos que siempre elijas una copa balón si quieres apostar por lo seguro, ya que funcionan muy bien desde una perspectiva estética. También desde un enfoque funcional.

2. Olvidarte de enfriar los ingredientes

Lo peor que puedes hacer al preparar un gin tonic en casa es olvidarte de enfriar los líquidos que componen a esta simple, pero delicada bebida.

En consecuencia, tienes que planificar tus tiempos para que la tónica y la ginebra permanezcan un buen rato en refrigeración.

Además, meter la ginebra en el congelador eleva tus posibilidades de que el hielo permanezca intacto por mucho más minutos cuando la copa esté servida.

3. Sobrepasarse con las especias y aromatizantes

Reinterpretaciones del gin tonic es lo que abunda en la industria de la coctelería en este preciso momento. Pepino, pimienta, frutos secos y flores aromáticas, son algunos de los elementos que más se están utilizando para darle un giro innovador a esta bebida que está tan de moda a nivel mundial.

Tienes que recordar que el verdadero propósito de estas adiciones son realzar el aroma y el sabor del gin y no enmascararlo en una sensación completamente diferente en el paladar.

4. Verter incorrectamente la tónica

Emplear los agitadores en espiral que tanto se ven en los bares más famosos de España es una decisión contraproducente cuando se trata de preparar un gin tonic. Esto por el hecho de que removerlo romperá las burbujas.

Lo que debes de hacer al echar la tónica en la ginebra es proceder con extrema cautela, inclinar la copa y servirla de la misma forma en la que lo harías con una cerveza.

Conociendo todos estos detalles puedes sentirte más seguro de preparar un gin tonic la próxima vez que estés reunido con colegas o con tu familia.

Recuerda que en Bruni Collin’s te ofrecemos una botella destilada con los mejores estándares de la industria, ideal para degustar en el contexto que tú prefieras.